Más Allá de las Asignaturas: El Programa Curricular como Herramienta de Éxito
Moises Elias Samata Hualpa
No hace mucho me
reencontré con un viejo compañero de la secundaria en un taller extracurricular
de la universidad. Fue una grata sorpresa. En ese primer encuentro hablamos de
muchas cosas, sobre todo, de cómo había sido nuestro paso por la universidad. En
algún punto de la conversación le comenté que abandoné la carrera de
Matemáticas y que ahora estudiaba Educación en la especialidad de Lengua,
Literatura, Psicología y Filosofía. Él mostró expresión de decepción ante tal
afirmación mía. “Tú dabas para más” me dijo. No sé que cara le habré puesto, no
lo recuerdo, pero inmediatamente después agregó: “Cálmate, no te quise ofender.
Escucha, si te hubieras quedado en matemáticas, ahora ya estarías terminando la
carrera. Además, cualquiera puede ser profesor, solo basta con estar formado
profesionalmente en algo para incursionar en la docencia. Mejor hubieras
estudiado Literatura y Lingüística, después de todo, supongo que ellos llevan
los mismos cursos que tú, solo que con mayor profundidad”. Recuerdo haber pensado
que él era un tonto por creer eso, sin embargo, reparé en que, hasta el
momento, no me había interesado saber qué cursos voy a llevar en mi paso por la
universidad. La intuición me dice que es importante conocer el programa
curricular de mi carrera y especialidad, pero ¿por qué? Bajo ese contexto
sostengo que, ser consciente del programa curricular de la carrera y
especialidad que se estudia es un pilar fundamental en la formación de
profesionales competentes. En los siguientes párrafos argumentaré en puntos muy
sencillos esta posición.
En primer lugar, tener pleno
conocimiento del programa curricular de la carrera que se estudia aumenta el
rendimiento académico. Según Pérez et al., (2020), una adaptación exitosa a la
vida universitaria que permita reducir el porcentaje de desaprobados y mejorar
los niveles de aprendizaje, depende de diversos factores, uno de los cuales es
plantearse objetivos durante el primer semestre de estudios. Respecto a estos
últimos, los autores citados señalan que la mayoría de los universitarios se
plantean adquirir los conocimientos necesarios para ejercer la profesión. Sin
embargo, para concretar ese objetivo es imperativo ser consciente de los cursos
a llevar pues, tal como manifiestan Sáiz y Valdivieso (2020), permitirá
identificar las fortalezas o debilidades en los saberes previos y, con esto, motivar
la toma de acciones orientadas a la consecución de un buen rendimiento
académico. Por ejemplo, participar en grupos de estudio, tomar cursos de
nivelación, investigar, etc.
En segundo lugar, impacta
positivamente en la reducción del riesgo de deserción universitaria. Aproximadamente
el 18,9% y el 21,9% de los estudiantes universitarios peruanos, del primer y
segundo año respectivamente, trabajan para obtener ingresos económicos. Esta es
una situación que puede representar un riesgo de interrupción de estudios
(DIGESU, 2021). Por otro lado, hablando específicamente de los estudiantes de
educación egresados durante el periodo 2011-2019 en el Perú, de acuerdo con los
estudios realizados por Auccapuri et al. (2021), manifiestan un descontento
respecto a gran parte de los cursos, generales y de especialidad, con los que
fueron formados, señalándolos como sumamente teóricos y, en muchas ocasiones,
innecesarios, hecho del que solo se percataron una vez comenzaron a trabajar en
la docencia. Por lo tanto, si el estudiante se ve en la obligación de tener
trabajar y estudiar a la vez, conocer los cursos que debe llevar le hará
posible discriminarlos en función de la importancia que tengan, distribuyendo
adecuadamente su tiempo, recursos y esfuerzo.
Finalmente, instará al
estudiante a buscar alternativas complementarias de aprendizaje para asegurar
la idoneidad de su formación profesional. Para el Marco del Buen Desempeño
Docente, las profesiones son actividades sociales que se configuran en función
de las necesidades de la sociedad (Minedu, 2014). El mundo actual se
caracteriza por el cambio constante, por tal motivo, el Artículo 40 de la Ley
Universitaria, Ley N.º 30220, estipula que cada universidad debe actualizar su
currículo cada tres años o cuando sea conveniente según los avances científicos
y tecnológicos (Minedu, 2020). Sin embargo, los alumnos que comienzan a
estudiar en un determinado año, se quedan atrapados en una sola malla
curricular y, cuando esta se actualice, incluso si es poco tiempo después, no serán
tomados en cuenta. Si no hacen nada al respecto, quedaran en desventaja.
En conclusión, conocer el
programa curricular de la carrera y especialidad que se estudia es esencial
para mejorar el rendimiento académico, reducir la deserción universitaria y
promover la búsqueda activa de alternativas complementarias de aprendizaje, lo
que en conjunto asegura la formación de profesionales competentes y bien
preparados. Reconocer y comprender el programa curricular no solo es una
responsabilidad académica, sino una inversión en el propio crecimiento
profesional. Es el primer paso hacia una carrera sólida y satisfactoria, donde
cada curso y experiencia formativa se convierten en bloques de construcción
fundamentales para el éxito futuro.
Auccapuri, A. A. H., Ortiz, Z. L., Mendoza, M. U. U., Salas,
J. C., & Palacios, M. D. V. (2021). Planificación curricular en la
enseñanza universitaria y desempeño profesional de egresados en
educación. Ciencia Latina Revista Científica Multidisciplinar, 5(3),
2563-2589. https://www.ciencialatina.org/index.php/cienciala/article/view/474
Minedu (2014). Marco del Buen Desempeño Docente. Gob.pe.
http://www.minedu.gob.pe/pdf/ed/marco-de-buen-desempeno-docente.pdf
Minedu (2020). Ley Universitaria, Ley N.° 30220. Gob.pe.
Recuperado el 4 de febrero de 2024, de
https://www.minedu.gob.pe/reforma-universitaria/pdf/ley_universitaria_04_02_2022.pdf
Pérez, A. B. D., Quispe, F. M. P., Aguilar, O. A. G., &
Cortez, L. C. C. (2020). Transición secundaria-universidad y la adaptación a
la vida universitaria. Revista de ciencias sociales, 26(3),
244-258. https://dialnet.unirioja.es/servlet/articulo?codigo=7565479
Sáiz, M. C., & Valdivieso, L. (2020). Relación entre
rendimiento académico y desarrollo de Estrategias de autorregulación en
estudiantes universitarios. Revista Electrónica Interuniversitaria de
Formación del Profesorado, 23(3). https://doi.org/10.6018/reifop.385491
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